Un sentimiento transformador

La compasión es el puente que une corazones en medio del fragor de la vida, el sentimiento que ablanda nuestras corazas y nos conecta con la vida de toda la naturaleza, de nuestro planeta y del resto de seres humanos. Es lo que nos puede salvar de la alienación a la que parece que nos vemos abocados

La palabra compasión nos puede traer reminiscencias religiosas y que a veces podamos, sin querer, atribuirlas a personas remilgadas o puritanas. Sin embargo la compasión es un sentimiento poderosísimo que abre nuestro corazón y fomentar la conexión con el mundo. Incluso, nos puede salvar de muchas neurosis al llevarnos más allá de nosotros mismos.

El dolor es una realidad de nuestra vida diaria. Vivimos con mucha aflicción, envejecemos, enfermamos y morimos. Un montón de fuerzas naturales, sociales, económicas, políticas nos causasn problemas, tristeza, estrés…Tanto nosotros, como aquellos aqueirnes amamos estamos atrapados por fuerzas que escapan a nuestro control. Solo hace falta mirar un telediario para darse cuenta. Se trata de dukkha, la primera verdad noble de las enseñanzas budistas, lo primero que enseñó el Buda tras su iluminación.

Lo que solemos hacer es escapar de ese dolor y activar actitudes para protegernos de el, para huir de la realidad ,y esto añade siempre sufrimiento al dolor a corto o medio plazo. En esto consiste básicamente el condicionamiento humano, lo que los budistas llaman la rueda del samsara,

Sin embargo nuestra actitud ante el dolor puede ser bien distinta. Es posible abrir el propio corazón y permitirse sentir ese dolor como algo que nos ablanda, que nos purifica de al´gun modo. Es algo que nos vuleve mucho más amorosos y amables. Seguro que si buscas en tu experiencia encontrarás alguna vivencia de este tipo, de “sentirte” con el dolor de otro, de ver relfejada en ese otro tu propia humanidad y sentir un impulso sincero y cálido que fluye desde tu corazón hacia el del otro. Dentro de lo inevitable o de lo doloroso que pueda ser lo que uno vive, ese sentimeinto transforma la vivencia y a nosotros mismos de una manera radical.

Cultivar la compasión es cultivar una vida de corazón, crecer en una energía amorosa que sana y mira cara a cara la realidad. Es aprender a apreciar la vida tal y como es.

Si te interesa iniciar este aprendizaje profundo te ofrezco para empezar el programa gratuito de “Corazón y Vida” para que comiences a conectar con tu corazón y con la vida que estás viviendo , reconociendo lo que recibes de ella con gratitud para desde ahí, abrir también el corazón a lo que es doloroso y difícil a través de la compasión

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